Las distinciones entre ancianos
docentes
y ancianos gobernantes
Según las normas
de la Iglesia Presbiteriana de las Américas (PCA)
por
Roger Smalling, D. Min
El
propósito de esta tesis es apoyar de la Biblia las distinciones presbiterianas
tradicionales entre los ancianos docentes y gobernantes. Todos estamos de acuerdo
que el término anciano se refiere a
una clase de líder. La pregunta es si dos oficios de anciano existen dentro de
una clase, o si algunas distinciones son meramente descriptivas de diferentes
funciones.
El asunto tiene consecuencias prácticas, que ha llevado más allá de
una división teológica. ¿Quién tiene autoridad para administrar la Palabra y
los sacramentos a una congregación local? ¿A quién es delegada la función de
discipular la iglesia local y llevarla a la completa obediencia a Cristo?
¿Tiene un oficio el derecho de gobernar al otro?
En su lugar, esto
justificará las medidas tradicionales que los presbiterianos han tomado para
asegurar la continuación de estas distinciones.
En esta tesis, demostraré de la Escritura tres proposiciones
lógicas:
Existe una clase de anciano con dos ordenes de
oficiales:
anciano docente y anciano gobernante. Aunque ellos tienen
ciertas funciones que se superponen, sus llamados y ordenaciones son
diferentes. Las dos ordenes de oficiales son iguales en autoridad gubernamental
en las cortes de la iglesia. El uno no gobierna sobre el otro.
Este concepto es llamado paridad
dentro de los círculos presbiterianos.
Al anciano docente solo es
delegada la autoridad de predicar y enseñar la Palabra a la congregación, y
administrar los sacramentos. Estos tienen la responsabilidad de pastorear y
discipular a todos los miembros de la congregación, incluyendo a los ancianos
gobernantes.
Procederé mostrando primero cual es la posición de la PCA en estos
puntos en la Parte Uno, siguiendo en la Parte Dos con justificaciones
escriturales. Esto sigue el patrón de los Estándares de Westminster, que
establece lo que creemos, presentando a continuación las evidencias
escriturales.
La segunda parte clarifica que estas distinciones no son el producto
de la tradición pero están basadas en la continuidad de la Biblia, comenzando
desde el tiempo de Moisés hasta las epístolas del Nuevo Testamento.
Parte uno
A continuación, se muestra un diagrama tomado de la PCA Position
Digest Parte V,
página 456.
El diagrama indica que aunque
hay una clase de oficio llamado anciano,
no obstante los ancianos docentes y
gobernantes no son los mismos
oficiales.
Recomendación no.1:
Que la Asamblea General afirma que la Escritura enseña que en adición
al oficio fundamental de todos los creyentes, hay también clases especiales y
perpetuas de oficios en la Iglesia, anciano y diácono, y que hay dentro de la
clase de anciano dos órdenes, docente y gobernante.
Adoptado, 7 Asamblea General, 1979. Position Papers, Vol.5, P.457
Nuestros estándares por consiguiente reconocen una clase de anciano,
dividido en dos órdenes: anciano gobernante y anciano docente. Un anciano
gobernante no se convierte en un anciano docente meramente porque el enseña una
clase o da una prédica. Ni un anciano docente llega a ser un anciano gobernante
porque el ejerce algunas funciones administrativas. La diferencia entre ellos
no es una función particular en un momento dado. Ellos pertenecen a órdenes
diferentes, según la posición mantenida por la PCA.
(Defensa escritural seguirá en la Parte Dos)
¿Reconoce la PCA
el concepto de paridad en el gobierno entre los dos oficios? Si.
Este diagrama representa el concepto de paridad gubernamental. Note
que los dos oficios se superponen. Juntos, gobiernan la congregación pero no se
gobiernan el uno al otro. 1Timoteo 5:17
¿Quién tiene la autoridad para predicar la Palabra de Dios en los
púlpitos de la PCA?
El catecismo mayor
establece:
Pregunta 158. ¿Por quién debe
ser predicada la Palabra de Dios?
Respuesta. La Palabra de Dios
debe ser predicada por aquellos que están dotados de las cualidades suficientes
y aprobados de la manera debida para este oficio.
Aparece una ligera ambigüedad en esta declaración. Tradicionalmente,
ha sido entendido que Westminster delega a los ancianos docentes ordenados, aunque el término pastor o ministro no se use. Después de todo, ¿Qué pasaría si un anciano
gobernante puede predicar mejor que un anciano docente cualquiera? La Asamblea
PCA de 1979 responde:
Recomendación no.4:
La Asamblea General reafirma la posición
presbiteriana histórica expresada en LC 158, que nadie debe predicar el
evangelio sino aquellos quienes son llamados y dotados de Dios; y por
consiguiente solamente aquellos hombres que son ordenados o licenciados
apropiadamente pueden predicar en los púlpitos de la PCA; y que a los ancianos
gobernantes se les permite y anima a renovar la práctica histórica de exhortar
al pueblo de Dios. Adoptado, P. 457-458
Esta recomendación se enlaza a la recomendación No.5 que trata con la
relación del pastor con el consistorio. De esto vemos que la PCA considera el
púlpito como el dominio habitual del anciano docente, no obstante el anciano
gobernante puede ejercer cualquiera de los dones ministeriales de exhortación
que el posea en otros dominios y circunstancias.
En la PCA, no es aceptada la práctica de programar dentro de la agenda
de prédicas regulares de la iglesia, aquellos que no son ordenados como ancianos
docentes .
¿Quien tiene autoridad para administrar los sacramentos?
La Confesión de fe de Westminster afirma:
Solo hay dos sacramentos
instituidos por Cristo nuestro Señor en el evangelio; y son el Bautismo y la
Cena del Señor; ninguno de los cuales debe ser administrado sino por un
ministro de la Palabra legalmente ordenado. Capítulo 27, Art.4.
Catecismo mayor
Pregunta 169. ¿De qué manera
mandó Cristo que fuesen dados y recibidos en el sacramento de la Cena del
Señor?
Respuesta. Cristo mandó que los
ministros de la palabra, en la administración del sacramento de la Cena del
Señor,...
Pregunta 176. ¿En qué son
semejantes el sacramento del Bautismo y el de la Cena del Señor?
Respuesta. ... ambos son sellos
del mismo pacto, deben ser administrados por ministros del evangelio y no por
otras personas;...
Considerando esto, está claro que la posición de los Estándares de
Westminster es que los ministros del evangelio y sólo estos, tienen la
autoridad para ministrar los sacramentos en nuestras iglesias.
La declaración oficial de la PCA es como sigue:
Recomendación no. 8:
La Asamblea General afirma que
de acuerdo con los Estándares Confesionales de la Iglesia, solamente ancianos
docentes ordenados legalmente
pueden administrar los sacramentos.
Adoptado, 7th Asamblea General, 1979 Position
Papers,
Vol.5, P.461
Como justificación para esta recomendación, el comité hizo dos
señalamientos:
Si la PCA quisiera hacer cambios
mayores en cuanto a que los ancianos gobernantes administren los sacramentos
sería necesario mayores cambios en los estándares confesionales. Aunque los
estándares no deben ser puestos sobre la Escritura como una regla de fe y
práctica, sin embargo hemos dado un fuerte testimonio de su validez y veracidad
frente a las Escrituras y los cambios sólo podrían hacerse cuando haya una
clara y grande evidencia de que bíblicamente están errados. No encontramos tal
evidencia en el caso de la administración de los sacramentos. Position Papers, Vol.5, P.460
Es de notar aquí que el Comité consideró que el peso de la prueba está
en aquellos que se oponen a nuestros estándares, para que prueben lo contrario,
en lugar de que el Comité pruebe la validez de los mismos. Luego el comité añade:
La administración de los
sacramentos, por su propia naturaleza, es un ejemplo de la proclamación de la
Palabra de Dios y ... debería ser realizada sólo conjuntamente con la
predicación de la Palabra.
Position
Papers,
Vol.5, P.460
En el contexto, el comité al reconocer que solamente los ancianos
docentes tienen autoridad para
proclamar la Palabra regularmente desde el púlpito, entonces, por necesidad
lógica, solamente estos tienen la autoridad para administrar los sacramentos,
que la Palabra autoriza.
¿Reconoce la PCA una sola ordenación para el oficio de anciano, o
reconoce dos ordenaciones, una para los ancianos docentes y otra para los ancianos gobernantes?
La declaración oficial de la PCA dice como sigue:
Recomendación no.7:
Nosotros afirmamos que la
ordenación de ancianos es para una orden particular al interior de la clase de ancianos,
sea para el anciano docente o para el anciano gobernante. Ambas órdenes de
ancianos incluyen ciertas funciones las cuales están descritas en la Escritura,
... {aquí sigue una lista larga y tediosa} ... Adicionalmente, la orden de anciano
docente incluye la función de la predica pública de la palabra y la administración
de los sacramentos; además de ciertas cosas requeridas en los patrones
contemporáneos de la vida de la iglesia como son oficiación de las ceremonias
de matrimonios y funerales. Adoptado, Séptimo Asamblea General 1979 Position Papers, Vol.5, P.459-460
La PCA reconoce dos ordenaciones diferentes, porque el oficio del anciano
docente incluye funciones que el de anciano gobernante no contempla. La
diferencia entre las dos no está solamente en realizar la función particular de
administrar la Palabra y los sacramentos. Es un llamado y ordenación para
realizar estas funciones.
¿Cuál es la posición de la PCA en
relación a la igualdad de votantes?
La declaración oficial de la
PCA dice lo siguiente:
Recomendación no.5, Punto A3:
Las cortes de la iglesia que
estén sobre el nivel del consistorio buscan expresar la paridad con un balance
numérico entre los ancianos docentes y gobernantes. A nivel del consistorio
usualmente hay sólo un anciano docente, o a lo más unos pocos, frente a un
número más grande de ancianos gobernantes. Ayuda a preservar la paridad dándole
la moderación a uno de la minoría de ancianos docentes. Adoptado, Asamblea
General, 1979, Position
Papers,
P.458
La recomendación no.5 es una larga y tediosa respuesta a una
sugerencia hecha por una Iglesia en la Florida en la que decía que un anciano
gobernante podía moderar el consistorio en vez de que el pastor sea
automáticamente el moderador del consistorio. La recomendación reafirma la
practica en la PCA de que el pastor es el moderador y rechaza la sugerencia de
la iglesia de la Florida. Debido a que la resolución es bastante larga,
resumimos las razones a continuación:
1. El Concilio de Jerusalén de
Hechos 15, estuvo presidido por un anciano docente. Este es el precedente
bíblico.
2. La práctica general de las
iglesias desde el tiempo de los apóstoles ha sido que las iglesias locales
estén presididas por sus ministros. Se ha demostrado que esto es beneficioso.
3. Cualquier otra cosa sería un
rompimiento de la práctica reformada de 400 años.
4. Esta práctica ayuda a guardar la
paridad debido a que los ancianos docentes, normalmente, son la minoría en el consistorio.
5. Debido a que el anciano docente
es un miembro del presbiterio, su conexión con el mismo ayuda a fortalecer los
lazos de unidad entre la iglesia local y el presbiterio.
6. Cuando el anciano docente no es
el moderador del consistorio, entonces puede haber el peligro de que este sea
considerado como un mero secretario en lugar de un Ministro de la
Palabra.
La introducción a la recomendación también menciona que
cuando una iglesia elige un pastor, ellos le están eligiendo, de manera
automática, como el moderador del consistorio.
Se puede entonces
deducir que la PCA se esfuerza en preservar la paridad en la representación al
interior de las cortes. En los casos en que la paridad no se puede alcanzar, se
aconseja que otras formas administrativas sean implementadas para conseguir la
paridad.
Ha sido dicho por algunos que la posición de la PCA en
relación a estos puntos es mera tradición. ¿Tienen estas posiciones un
precedente histórico anterior al de Norte América?
Aunque la tradición no es autoritativa, ella tiene valor en cuanto
revela la verdadera naturaleza de la historia y práctica de la reforma. Si la
posición de la PCA está de acuerdo con la práctica reformada a través del
tiempo, entonces los misioneros norteamericanos no han enseñado su
cultura.
Las citas a continuación viene de las Confesiones de Fe
de varias culturas y lenguas, que se remontan al siglo XVI. Nuevamente, reconocemos
que la tradición no es autoritativa. La Biblia es autoritativa. Ellas tampoco
son referencias de una cultura. Una revisión de la historia puede dar un
sentido de cautela a aquellos que podrían desviarse de la norma establecida.
Observe las citas siguientes de confesiones reformadas antiguas, cuyas
fechas se anexan:
Confesión Helvética:
1536
... que los misterios de las Escrituras sean diariamente expuestos y
explicados por ministros calificados...
Artículos de Lausana, Suiza:
1536
Dicha Iglesia no reconoce otro ministro excepto a aquel que predica
la Palabra de Dios y administra los sacramentos.
La Confesión de
Ginebra, 1536 por Juan Calvino
Nosotros no reconocemos a otros pastores
en la Iglesia sino a los pastores fieles de la Palabra de Dios, que alimentan
las ovejas de Jesucristo....
Nosotros creemos que los
Ministros de la Palabra de Dios y los ancianos y Diáconos, deben ser elegidos a
sus respectivos oficios mediante una elección legal de la Iglesia....
Confesión de Fe Francesa:
1559
...nosotros creemos que el orden de la Iglesia, establecido por su
autoridad, debe ser sagrado e inviolable, y que, por lo tanto, la Iglesia no
puede existir sin pastores para la instrucción, a quienes debemos respetar y
escuchar reverentemente, cuando ellos han sido llamados de manera apropiada y
ejercen su oficio fielmente.
Las prácticas de la PCA tienen su
origen en un movimiento transcultural hace 400 años, conocido como la reforma.
Parte dos
¿Es correcto usar el Antiguo Testamento como una guía para la
eclesiología del Nuevo Testamento? No es solamente correcto, es obligatorio
según el apóstol Pablo:
¿No sabéis que los que trabajan en las cosas sagradas, comen del templo, y que los que sirven al altar, del altar participan? Así también ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio, que vivan del evangelio. 1Corintios 9:13,14
Pablo arguye por el mantenimiento a tiempo completo de los ministros
del Nuevo Testamento sobre las bases de sus contrapartes del Antiguo
Testamento, los sacerdotes. El ve el servicio sacerdotal en el altar como un
prototipo del ministro del evangelio. Como el sacerdote vivía exclusivamente de
este servicio por un especial llamado de Dios, así los ministros del Nuevo
Testamento tienen que vivir exclusivamente de la predicación del evangelio.
Pablo, usando este argumento, revela que considera legítimo aplicar
los principios generales del Antiguo Testamento como el patrón para la
eclesiología del Nuevo Testamento. Su uso de una pregunta retórica demuestra
que Pablo considera la respuesta obvia. Pablo habla a los Cristianos como si
ellos deben saber estas cosas de su conocimiento del Antiguo Testamento.
Como los sacerdotes del Antiguo Testamento, este es un llamado para el
ministerio del evangelio que no viene a todo el mundo.
Y nadie toma para sí esta honra, sino el que es llamado por Dios, como lo fue Aarón. Hebreos 5:4
Pablo declara que los sacerdotes del Antiguo Testamento fueron
prototipos de lo que los ministros del Nuevo Testamento predicarían. El
argumento de Pablo en 1Corintios9 llega a ser significativo si la eclesiología
del Nuevo Testamento sigue el patrón del Antiguo Testamento.
Pablo no animaría a los ancianos gobernantes a renunciar a sus
ocupaciones seculares para predicar a tiempo completo. Su concepto apoya el
punto de vista de dos oficiales con distintos llamados y ordenaciones.
De igual forma, en Romanos 15:16 Pablo usa la terminología del Antiguo
Testamento para describir su servicio como un predicador del evangelio:
…para ser ministro de Jesucristo a los gentiles, ministrando el evangelio de Dios, para que los gentiles le sean ofrenda agradable, santificada por el Espíritu Santo.
La palabra ministro aquí es letargos y la palabra ministrando es hierourgeo. Ambas palabras se refieren al ministerio de los
sacerdotes en el Antiguo Testamento
La eclesiología del Nuevo Testamento está basada en los patrones del
Antiguo Testamento. No somos libres, por tanto, para interpretar la
eclesiología del Nuevo Testamento sin referencia a los principios generales del
Antiguo Testamento.
Ambos Testamentos indican, como Pablo demuestra, que algunos son
llamados para el ministerio de la Palabra y los sacramentos y algunos no.
Aquellos que son llamados, son llamados a tiempo completo como
regla.
¿Somos libres de limitar nuestro entendimiento de la
eclesiología al Nuevo Testamento solamente?
Definitivamente que no. La hermenéutica reformada examina la
continuidad de la Biblia como un todo. Si estamos de acuerdo que el Nuevo
Testamento tiene autoridad sobre el Antiguo Testamento como la revelación
final, no obstante, si algo parece contradecir el principio de continuidad,
algo está equivocado y necesitamos regresar y revisarlo de nuevo. Nuestras
conclusiones deben siempre ser cumplimientos del Antiguo Testamento, no
negaciones.
Este punto de vista global de la Escritura, al tratar
con preguntas de eclesiología, no es nuestra propia interpretación moderna. Los
autores de Westminster, en su folleto, La Forma de gobierno
eclesiástico establecen:
De la misma manera que hubieron ancianos
del pueblo junto a los sacerdotes y levitas en la iglesia judías para su
gobierno, de la misma manera Cristo, quien instituyó el gobierno de la iglesia
y los gobernantes eclesiásticos, El suministró algunos en su iglesia además de
los ministros de la palabra, con dones para el gobierno y con la comisión de
ejercerla cuando sean llamados para hacerlo, quienes deben juntarse con el
ministro en el gobierno de la iglesia. A quienes en las iglesias reformadas
comúnmente se les llama ancianos. P.402. Citado en el PCA Digest, Vol.5, P.476
¿Vemos dos oficios de liderazgo espiritual en el Antiguo
Testamento?
Si.
Antes de avanzar, aclaremos un punto. Se ha dicho que los ancianos de
Israel fueron meros políticos, autoridades civiles y gobernadores, no líderes
espirituales. Ambos Testamentos, sin embargo, hacen una distinción entre los ancianos
de Israel y los líderes de Israel.
En el Antiguo Testamento:
… Y Jehú escribió cartas y las envió a Samaria a los principales de Jezreel, a los ancianos … 2Reyes 10:18
… conforme al acuerdo de los príncipes y de los anciano … Esdras 10:
… se reunieron en Jerusalén los gobernantes, los ancianos y los escribas … Hechos 4:5
Entonces Pedro, lleno del Espíritu Santo, les dijo: gobernantes del pueblo, y ancianos de Israel … Hechos 4:8
Dos oficios de liderazgo espiritual relacionados existieron desde el
principio.
Entonces Jehová dijo a Moisés: Reúneme setenta varones de los ancianos de Israel, que tu sabes que son ancianos del pueblo y sus principales; y traelos a la puerta del tabernáculo de reunión, y esperen allí contigo. Números 11:16
Y salió Moisés y dijo al pueblo las palabras de Jehová; y reunió a los setenta varones de los ancianos del pueblo, y los hizo estar alrededor del tabernáculo. 25 Entonces Jehová descendió en la nube, y le habló; y tomó del espíritu que estaba en él, y lo puso en los setenta varones ancianos; y cuando posó sobre ellos el espíritu, profetizaron y no cesaron. Números 11:24,25
Note aquí lo siguiente:
·
Tanto el sacerdote (Moisés) como los ancianos se gozaron con el mismo
Espíritu de Dios y sus manifestaciones.
·
Ambos compartían la autoridad sobre la congregación. Pero el sacerdote
retenía para sí las funciones sacramentales.
Este texto muestra que el rol de los ancianos era una función
espiritual, no solo un nombramiento político. Sin embargo, su participación
espiritual nunca se la miró como equivalente para la afiliación de los
ministerios en las funciones del sacerdote.
La Palabra de Dios fue delegada a ambos tipos de líderes, primero a
los sacerdotes (aquellos con autoridad sacramental) luego a los ancianos del
pueblo.
Y escribió Moisés esta ley, y la dio a los sacerdotes hijos de Leví, que llevaban el arca del pacto de Jehová, y a todos los ancianos de Israel. Deut 31:9
Entonces vino Moisés, y llamó a los ancianos del pueblo, y expuso en presencia de ellos todas estas palabras que Jehová le había mandado. Éxodo 19:7
Los ancianos participaban en funciones sacramentales, bajo la
autoridad y liderazgo de los sacerdotes. Pero estos oficios y funciones nunca
fueron confundidos.
Si toda la congregación de Israel hubiere errado, y el yerro estuviere oculto a los ojos del pueblo, y hubieren hecho algo contra alguno de los mandamientos de Jehová en cosas que no se han de hacer, y fueren culpables;
Luego que llegue a ser conocido el pecado que cometieren, la congregación ofrecerá un becerro por expiación, y lo traerán delante del tabernáculo de reunión 15 Y los ancianos de la congregación pondrán sus manos sobre la cabeza del becerro delante de Jehová, y en presencia de Jehová degollarán aquel becerro en el tabernáculo de reunión 17 y mojará el sacerdote su dedo en la misma sangre, y rociará siete veces delante de Jehová hacia el velo. Levítico 4:13-17
Note que los ancianos participaban en el proceso, pero el sacerdote
ofrecía la sangre. Por consiguiente, los ancianos participaban en un forma que
la gente común no podía. Esto, sin embargo, no causaba ninguna confusión entre
el anciano y el sacerdote. Ningún anciano pensaba que el tenía autoridad
sacramental debido a esto.
Los ancianos eran principalmente representantes del pueblo. Esto es
demostrado en ambos testamentos por el repetido término ancianos del pueblo. (Éxodo 19:7; Números 11:16 y 11:24; Jeremías
19:1; Mateo 21:23, 26:3, 26:47 y 27:1; Lucas 22:66)
·
Hubo una congregación.
·
Hubo una categoría de oficiales oficiando en los altares cuya función
fue proclamar la Palabra de Dios al pueblo y ofrecer sacrificios, por ejemplo
los sacramentos. Estos representaban a Dios para el pueblo.
·
Hubo una categoría de oficiales ayudando a los superiores, cuya
función principal fue gobernar.
·
Hubo algunas superposiciones de ambas participaciones gubernamental y
sacerdotal pero las distinciones entre las dos clases de oficiales nunca fueron
confundidas.
Note también que no puede ser argüido que los ancianos eran meramente
oficiales gubernamentales de la nación y que no hay correspondencia entre estos
y los ancianos del Nuevo Testamentos, porque:
1. Ellos fueron bautizados en el
mismo Espíritu que Moisés. Por tanto, su llamado era un llamado espiritual de
Dios.
2. A ellos también les fue delegado
salvaguardar la Palabra de Dios.
3. Ellos tenían un derecho limitado
para participar en el ofrecimiento de los sacrificios.
Por tanto, los ancianos del Antiguo Testamento que cooperaban con los
líderes espirituales para gobernar al pueblo, podrían ser considerados muy
apropiadamente como ancianos gobernantes.
Los Judíos conservaron esto a través de los tiempos del Nuevo
Testamento. Note el siguiente texto de Lucas 22:66,
Cuando era de día, se juntaron los ancianos del pueblo, los principales sacerdotes y los escribas, y le trajeron al concilio, diciendo …
Este versículo es interesante porque es uno de tres en el cual la
palabra griega presbiterion ocurre en el Nuevo Testamento. Una traducción
literal sería: Y al mediodía, el presbiterio
del pueblo se reunió, ambos, sacerdotes y escribas y le trajeron al concilio.
Note aquí que la palabra presbiterio
es definida como un cuerpo compuesto de sacerdotes (aquellos con funciones
sacramentales), acompañados por los escribas, (aquellos sin tales funciones).
Obviamente este presbiterio no era uno cristiano. No obstante, refleja
la continuidad a través de la Biblia de un concepto general de gobierno que los
apóstoles adoptaron después.
Conclusión: Vemos de estos textos que existió una categoría de líderes
espirituales en el Antiguo Testamento, llamados sacerdotes, que oficiaban en el
altar, proclamaban la Palabra por medio de prototipos, y ofrecían sacrificios.
También existió otra categoría de líderes espirituales, que tenían funciones
gubernamentales, pero no eran políticos. Su oficio era espiritual en naturaleza
y participaban a veces con los sacerdotes en funciones sacramentales.
El patrón en 1Timoteo 5:17,
Los ancianos que gobiernen bien, sean tenidos por dignos de doble honor, mayormente los que trabajan en predicar y enseñar.
Note del contexto y el versículo los siguientes hechos:
·
Hay una congregación.
·
Hay oficiales cuya función principal es trabajar en la predicación y
enseñanza de la Palabra, aunque ellos también gobiernan. Por extensión lógica,
esto debe incluir también los sacramentos, puesto que la Palabra es la que
autoriza los sacramentos.
·
Hay oficiales cuya función principal es gobernar, y no trabajan
mayormente en la predicación y enseñanza de la Palabra. Por extensión lógica,
esto debe también excluir las funciones sacramentales.
·
Hay una clara superposición en la forma en que el texto utiliza las
palabras.
¿Cuál precisamente es la diferencia entre esto y el patrón del Antiguo
Testamento? Muy poco en principio. Puesto que allí aparece una continuidad de
gobierno entre los dos testamentos, estamos justificados en aplicar los mismos
principios. Esto aclara la ambigüedad en 1Timoteo 5:17, así como la continuidad
del Pacto aclara la ambigüedad en el Nuevo Testamento con respecto a los
sacramentos.
El uso de la palabra ministro en
las Escrituras
Un estudio de este término a través de las Escrituras es complejo
puesto que traduce varias palabras griegas y hebreas. Estas palabras tienen
varios usos, muchos de los cuales son figurativos.
Cuando es usado en el Antiguo Testamento en referencia a ministrar la
Palabra al pueblo, está en conexión con los sacerdotes. Los dos términos,
ministro y sacerdote son usados juntos 41 veces en el Antiguo Testamento.
Textos ejemplos son:
... y mi pacto con los levitas y sacerdotes, mis ministros. Jeremías 33:21
… lloren los sacerdotes, ministros de Jehová … Joel 2:17
En el Nuevo Testamento, el término se asocia frecuentemente con
cualquiera de aquellos oficios en Efesios 4:11 asociado con ministración y
discipulado del Cuerpo de Cristo. Ejemplos:
Apóstoles: …para que tome la parte de este ministerio y apostolado... Hch.1:25
… y nosotros persistiremos en la oración y en el ministerio de la
palabra. Hechos 6:4
Pastores: (Note que Timoteo era un
pastor. Por eso Primera y Segunda de Timoteo son llamadas “cartas pastorales”).
… y enviamos a nuestro hermano Timoteo, servidor de Dios y colaborador nuestro en el evangelio de Cristo, para confirmaros y exhortaros respecto a vuestra fe. 1Tesalonicenses 3:2
Si esto enseñas a los hermanos, serás buen ministro de Jesucristo, nutrido con las palabras de la fe y de la buena doctrina que has seguido. 1Timoteo 4:6
Conclusión: Ambos Testamentos sostienen una distinción con respecto a
aquellos llamados para predicar la Palabra de Dios al pueblo versus cualquier
otro oficio eclesiástico.
Timoteo, pastor organizador
En 1Timoteo 3, vemos las calificaciones del carácter para los ancianos.
¿Cómo explicamos que en este texto no existe distinción entre ancianos
gobernantes y docentes?
Esta pregunta surge de un error en comprender la naturaleza de las
Epístolas pastorales. Recordemos quien era Timoteo y que estaba haciendo.
Timoteo era un pastor organizador, enviado por Pablo a poner las
iglesias en orden. Vemos esto en los siguientes textos:
Por esto mismo os he enviado a Timoteo, que es mi hijo amado y fiel en el Señor, el cual os recordará mi proceder en Cristo, de la manera que enseño en todas partes y en todas las iglesias. 1Corintios4:17
… y enviamos a Timoteo nuestro hermano, servidor de Dios y colaborador nuestro en el evangelio de Cristo, para confirmaros y exhortaros respecto a vuestra fe. 1Tesalonicenses 3:2
Observe estos puntos claves:
Timoteo era un ministro.
Es llamado servidor de Dios en 1Tesalonicenses 3:2.
Había sido ordenado
por un presbiterio en 1Timoteo 4:14.
El había sido enviado por Pablo para
confirmar en la fe a las iglesias que
Pablo había dejado. (1Corintios 4:17)
Había sido instruido para encontrar
hombres fieles capases de enseñar a otros. (2Timoteo 4:2)
El tenía
autoridad para ordenar ancianos. (1Timoteo 5:22)
A partir de estos puntos deducimos que las epístolas de Timoteo son
instrucciones a un pastor joven sobre como organizar una iglesia. En el Capítulo
3, Pablo le da a Timoteo algunas calificaciones del carácter para los ancianos.
Es posible, por tanto, que cuando Pablo escribió este capítulo, estuviera
pensando principalmente en los ancianos gobernantes.
Esto puede explicar el uso de obispado
en el versículo uno en lugar de maestro
o pastor: Si alguno anhela obispado,
buena obra desea. El término obispo
aquí es episkopos, que significa “obispado” o “supervisor”. Supervisión
es principalmente una función gubernamental.
Note también el uso de apto para
enseñar en el verso 2. Un anciano gobernante debe ser más que apto para enseñar. El debe ser un maestro,
capaz de refutar, reprender a sus oponentes y defender la sana doctrina con
eficacia, (1Timoteo 1:9).
Esto requiere un buen manejo de argumentos y herramientas didácticas,
lo cual no es mencionado en el capítulo tres. Pero se mencionan en todas partes
en las epístolas, dirigidas a Timoteo, un ministro ordenado.
Observe también que en 2Timoteo 2:2, Pablo le dice a Timoteo que
encuentre hombres fieles que puedan enseñar a otros. Es improbable que Pablo se
pase a los ancianos gobernantes en esto, si ellos existían. Aparentemente Pablo
estaba instruyendo a Timoteo como formar su consistorio.
Si es así, se hace verdaderamente difícil tomar cualquier texto de las
cartas pastorales para defender la posición de un solo oficio.
La función de discipular del pastor-maestro en Efesios 4:11-16.
En este texto, vemos tanto los títulos y funciones de los ministros de
la Palabra. La sentencia larga en versículos 12-16 describe las metas de su
ministerio hacia todos los cristianos. Estas son: equipar cristianos para el
ministerio, enseñarles el conocimiento del hijo de Dios, madurarlos en Cristo,
afirmarlos en sana doctrina y en general, llevarlos al crecimiento.
La palabra discipular resume
todo esto. Los medios por los cuales ellos lo hacen es la enseñanza de la
Palabra.
Note que el anciano gobernante no es mencionado en este texto. Si lo
fuera, tendríamos una contradicción porque ninguno de nosotros creemos que el
ministerio de la enseñanza es la función principal de los ancianos gobernantes.
Esto en cambio sugiere un distinción entre los dos oficios, la cual es
una diferencia de oficio, mas bien que una mera coincidencia de función.
En el versículos 10-12, vemos que Cristo ha dado dones a los hombres.
¿Cuáles son estos dones? Son los hombres del versículo 11 que Cristo ha dado a
la iglesia para llevarlos a la madurez.
Esto no puede lógicamente ser dicho de la misma forma de todos los
oficiales de la iglesia. De otra manera, todos seríamos maestros.
Dunckerley expresa esto con gran claridad.
No es
simplemente que él da a algunos hombres los dones para funcionar como
apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros. Es que los hombres que
son apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros son dados a la
iglesia para ministrar la Palabra y equipar a los santos para otras formas de
ministerio.
Position
Papers,
Vol.5, P.484.
¿Quiénes deben ser discipulados? Todos los miembros del cuerpo de
Cristo, incluyendo los ancianos gobernantes. En este texto de Efesios, vemos
que nadie es excluido. La posesión de un título eclesiástico no exime a nadie de
la congregación de ser discipulado.
A partir del texto de Efesios solamente, deducimos una distinción no
solamente de función sino también de oficio entre ancianos.
Maestros y administradores, 1Corintios 12:28
Dios ha puesto en la iglesia primeramente apóstoles, segundo profetas, tercero maestros, luego los que hacen milagros, después los que sanan, los que ayudan, los que administran, los que tienen don de lenguas. 1Corintios12:28
Pablo pone oficiales y dones en un orden específico, basado en la
importancia del don con respecto a la edificación de la iglesia. De ninguna
manera esto contradice el concepto de paridad de voz y voto en las cortes de la
iglesia. Pablo está hablando sobre la edificación del cuerpo de Cristo, no de
la relación entre los oficiales en términos de gobierno.
Observe que el tercer don ministerial en la iglesia es el de ser
maestro. Difícilmente se podría argüir que los pastores no están incluidos,
puesto que ya hemos visto que el término pastor
está enlazado inseparablemente con maestro
en Efesios 4:11, como un solo oficio.
Siguiendo en 1Corintios 12:28, más abajo, leemos los que administran. Esto debe incluir ancianos gobernantes, puesto
que la administración es su función.
Por consiguiente, este texto
sostiene una distinción entre los dos oficiales por listado y enumeración de
los mismos.
Nota importante: Usando este texto no se intenta apoyar la noción
Episcopal que el anciano docente es superior a los otros ancianos en autoridad
gubernamental. No es así. Se intenta demostrar la distinción, no inherente a la
superioridad personal. Podemos solamente especular los motivos que tuvo Pablo
para poner la lista en esta forma. Quizá fue porque el funcionamiento correcto
de los otros dones debe estar basado en la Palabra, enseñada sanamente.
Conclusión
Ha sido demostrado por las Escrituras en la sección de arriba que
existe en ambos Testamentos una categoría de líderes espirituales para quienes
la Palabra de Dios ha sido especialmente delegada, a fin de ministrarla al
pueblo de Dios. Puesto que este es su llamado y ministerio, en el Antiguo
Testamento estos son llamados sacerdotes y profetas y en el Nuevo Testamento,
son llamados pastores-maestros. Efesios 4:11-16 8
Parte
tres
La función de discipulador del pastor-maestro, junto con su función
exclusiva de administrador de la Palabra y los sacramentos, ¿Lo hace superior
en rango a los ancianos gobernantes? No.
No se puede encontrar ni un solo escritor presbiteriano que asegure
que estas funciones hagan superior en rango al anciano docente, en términos de
autoridad gubernamental. Cuando los escritores de la PCA afirman
consistentemente la exclusividad de la función sacramental del anciano docente,
son muy cuidadosos de asegurar la paridad de los ancianos gobernantes en
términos de la administración de la iglesia.
Según el pensamiento episcopal, la función de discipulador
automáticamente asume una superioridad en rango. Esto puede parecer natural
para algunas personas, pero es una conclusión no racional. ¿Por qué la
habilidad de enseñar, concedería a una persona, mayor voz y voto que una que no
ejerce la enseñanza? Ningún escritor de la PCA asume una superioridad gubernamental
basándose en la autoridad para ministrar la Palabra y los sacramentos.
Por consiguiente, asegurar la autoridad espiritual de los ancianos
docentes en lo que respecta a
discipular, predicar, enseñar o administrar los sacramentos no es, en ningún
sentido de la palabra, una afirmación episcopal. No hay razón para asumir que
reconocer tal autoridad debe necesariamente llevar a una forma de jeráquica.
Observe el Diagrama 2:
Este diagrama representa
el concepto de paridad gubernamental. Fíjese que los dos oficios se superponen.
Juntos, gobiernan la congregación, pero no se gobiernan el uno al
otro.
Ahora observe el diagrama 3:
En este diagrama, notamos que los ancianos gobernantes son objetos del
ministerio de los ancianos docentes porque ellos también son miembros de la
congregación. Observe que los ancianos docentes tienen esta relación con los ancianos
gobernantes, no debido a una superioridad en rango sino porque los ancianos
gobernantes son miembros de la congregación.
¿Qué pasa si los ancianos gobernantes rehúsan aceptar o reconocer que
deben ser discipulados por los ancianos docentes?
El ministerio de los ancianos docentes puede ser estorbado en perjuicio no solo
de la congregación, sino de los ancianos gobernantes también. Esto pasa si los ancianos
gobernantes se confunden e imaginan que el concepto de paridad gubernamental
significa que ellos no necesitan ser discipulados por los ancianos docentes.
Está muy claro en ciertos textos que los ancianos gobernantes también
tienen una relación pastoral con la congregación. ¿No apoya esto el punto de
vista de que son iguales a los ancianos docentes y que también son pastores? No.
Este es un error lógico. La palabra pastor, la cual significa apacentador
es usada en Efesios 4:11 con el título de pastor-maestro.
Entonces vemos en Hechos 20:28 que la palabra apacentar es la forma verbal del nombre apacentador. Esto parecería
apoyar a la opinión mencionada arriba.
Una falacia aparece aquí. El mero hecho de que hay superposición
dentro de las funciones de los dos oficios, no prueba nada. Ejemplo: Pedro se
llamó a si mismo un anciano mientras se dirigía a los ancianos en 1Pedro 5:1.
Sin embargo Pedro era apóstol ¿Debemos concluir de esto que los ancianos son
todos apóstoles? ¿O que no hay distinción entre apóstol y anciano?
¿Cuál
es la autoridad Escritural por la cual la Confesión de fe de Westminster
asegura que solamente ministros ordenados pueden administrar los
sacramentos?
Este es uno de aquellos puntos sobre los cuales la
Confesión dice que es una consecuencia
necesaria … deducida de las Escrituras. No existe ningún texto que
solamente los ancianos docentes administren los sacramentos. Pero la naturaleza
de su ministerio fuerza esta deducción.
Note los prototipos del sacerdote en el Antiguo Testamento. A estos
solo fueron dadas las funciones combinadas de proclamar la ley y administrar
los sacrificios, los cuales eran prototipos del ministerio del Nuevo
Testamento, como el apóstol Pablo mencionó en 1Corintios 9.
Estas dos funciones están unidas inseparablemente. La administración
de la ley significaba también administrar los sacrificios.
De la
misma forma, para ciertos oficios del Nuevo Testamento es delegada la
ministración de la Palabra de Dios al Pueblo. Pero la misma Palabra no puede
ser ministrada sin también administrar los sacramentos porque los dos están
inseparablemente unidos.
La conclusión es forzada.
¿En qué apoyo escritural se
basa la PCA para afirmar que los dos oficios tienen diferentes
ordenaciones?
Tenemos aquí otra consecuencia necesaria, es decir una situación en que ninguna
declaración existe en la Biblia, pero en que la conclusión sigue
inevitablemente de factores mencionadas en las Escrituras.
Los sacerdotes en el Antiguo Testamento recibieron una ordenación
especial, distinta de la de los profetas y ancianos. En Números 8, vemos la
prescripción para la ordenación de los sacerdotes.
La continuidad de ambos Testamentos demuestra que los dos oficios
siempre han existido dentro de una clase de anciano: Docentes y gobernantes.
Existe una superposición de funciones ocurre dentro de los dos oficios. Ambos
tienen autoridad gubernamental en común, pero solo los ancianos docentes ministran la Palabra de Dios y los sacramentos.
Los ancianos docentes usan estas
responsabilidades particulares para cumplir su rol de pastorear y discipulado
al pueblo de Dios.
Este
ensayo fue revisada y aprobada por los pastores del Presbiterio de Carolina del
Oeste, junio 2000.
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